Hola a todos, me llamo Ángela,
tengo 15 años, soy de Madrid y hoy os vengo a hablar de mi bautizo. Pensaréis
que no me puedo acordar de él ya que se supone que cuando te bautizan eres un
bebé, pero tengo la gran suerte de poder decir que me acuerdo perfectamente de
mi bautismo ya que lo he recibido este año. Antes de hablar del día de mi
bautizo me gustaría contaros la historia desde el principio. Para empezar en mi
familia son casi todos agnósticos, así que mis padres decidieron no bautizarme
cuando era un bebé. Creo que en esta historia no debería olvidarme de ciertas
personas una de estas es el P. Sema Grandos, no sé si le conoceréis, para quien
no le conozca os diré que es una persona excepcional, lleno de humildad y
simpatía. Tuve la suerte de que él fuera mi profesor de religión durante 5º y
6º de primaria y la verdad creo que fue aquí donde empezó todo. Sema nos
explicaba muy bien todas las parábolas y todas las historias de la Biblia, así
como vivencias suyas personales. Creo que aquí, sin yo saberlo, se plantó en mí
una semillita de fe. Luego pasé a ESO y mis amigos iban a JuCar desde hacía
mucho tiempo. Yo nunca había ido y me hablaban muy bien de todo lo que se
hacía, así que en 2º, a mitad de curso, me apunte pensando: a ver qué pasa, y
ese a ver qué pasa se ha convertido en algo muy grande: con cada reunión mi fe
iba creciendo y así fue como el P. Paco Daza, otra gran persona de mi colegio,
nos propuso a unos amigos y a mí la opción de bautizarnos y hacer la comunión.
Pero claro antes de
bautizarnos al ser mayores teníamos que prepararnos y dar catequesis así que
Mónica, Bea, Quique, Arturo y yo (mis compis de bautizo) hemos estado yendo a
catequesis todo este año con nuestro catequista. ¿Qué puedo decir de él? La RAE
define catequista como: 1. persona que instruye a los catecúmenos; 2. Persona
que instruye la catequesis (ejercicio de instruir en cosas pertenecientes a la
religión). Creo que debería llamar a la RAE, este significado no está bien,
para nosotros ha sido algo más que eso, no solo nos ha dado los conocimientos
de nuestra fe, también ha sido nuestro amigo, nuestro hermanito mayor, nos ha
cuidado en cada convivencias o campamentos… por eso creo que la definición de
catequista se queda corta para él, sin él nunca hubiéramos llegado a donde
estamos.
Y llegó el gran día, 23 de
Junio de 2013, nunca olvidaré este día. La noche anterior apenas pude dormir y
por la mañana de camino a la iglesia me temblaban las piernas. Al llegar a la
parroquia el coro estaba ensayando y os prometo que solo el ensayo de las
canciones ya me hacia emocionarme. Paco fue el encargado de oficiar la
ceremonia. Las cosas que sentí allí ese día no se pueden describir con
palabras, el momento del bautizo fue realmente especial, aunque Paco nos empapó.
Y luego la comunión fue ya como la guinda del helado. Después de aquello me
sentí nueva, no sé bien como decirlo, ya os digo que es difícil explicarlo con
palabras. Luego ese día lo pasé con mi familia celebrándolo. Me siento
realmente afortunada y orgullosa de mi familia que a pesar de no ser creyentes
respetaron mi elección y me apoyaron, también tengo que agradecerles a mis
padrinos todo lo que han hecho por mí ya que llevan toda la vida conmigo, a mis
amigos que, bueno, son ya como de la familia, a algún profesor que estuvo por
allí apoyándonos y por su puesto gracias a la parroquia, al párroco y a todas
las personas que hicieron de ese día el mejor de toda mi vida.
Lo que os pretendo mostrar es
que a pesar de esta sociedad que tiende a apartarse de sus creencias hay gente
todavía dispuesta a formar parte de la Iglesia. Quería deciros también que
nunca es tarde, durante este año he visto a un señor de más de 40 años
confirmándose. De verdad, si queréis dar un paso adelante en vuestra fe que no
os importe lo que os puedan decir o lo que puedan pensar de vosotros, que no os
de miedo decir sí a Dios. Dar un paso así no os va a convertir en raritos ni
nada. Yo actualmente tengo una vida bastante normal, sigo saliendo con mis
amigos a divertirme, voy al colegio como cualquier persona, si salgo llamo a mi
madre para que no se preocupe… en fin soy normal pero a la vez hay algo que me
hace sentir especial, por eso si queréis reafirmar vuestra fe id a vuestra
parroquia más cercana y preguntad al párroco él os dará consejo. En estos
últimos años la Iglesia ha sufrido varios escándalos, por eso la gente es
reacia a formar parte de ella pero a esa gente yo la pregunto si tú, que sabes
que eso está mal y no intentas cambiarlo, ¿quién lo hará? Necesitamos gente con
ganas de cambios y de mejoras en la Iglesia por eso lo repito, nunca es tarde,
NUNCA ES TARDE PARA SER FELIZ.
Angela del Moral
JuCar Misterios